Thursday, March 27, 2014

El Estudio en el Árbol


Tuve un sueño hace varios años. Soñé que yo llegaba con mi maleta a un lugar donde había un gran árbol. Salía a recibirme una de las salmistas que compartió con nosotros en el evento ES HORA DE ADORAR (Ludie Toles o Sue Powell, no recuerdo). El árbol en sí era una casa, pero no una casa cualquiera, sino una donde llegaban adoradores de distintas naciones. Todo tipo de artistas llegaban allí a residir y crear arte para el Señor.

El salón principal era en esencia un estudio en el interior del árbol. Había toda clase de instrumentos musicales en las paredes alrededor. Dejando mi maleta, me hice al piano vertical al fondo del salón y comencé a adorar al Señor. No sé cuánto tiempo habrá pasado antes de que llegara un trompetista. Aunque nunca antes nos habíamos visto, comenzó a acompañarme con su trompeta como si llevásemos años tocando juntos. El fluir era libre y sin esfuerzo. Las notas del piano y la melodía de la trompeta simplemente encajaban en perfecta armonía.

Sé que el sueño es metafórico en muchos planos, pero siempre me complace cuando conozco a alguien que ha rendido su corazón a Cristo y que busca adorarle con todo su ser. Josh Wise es una de esas personas. Lo conocimos como bailarín de Ballet Magnificat! en el año 2013. En el verano me enteré de que también toca el banjo. Arriba puedes ver a Josh en nuestro estudio, tocando el banjo de Martín para la grabación que Aldo está haciendo de la canción que compusieron Angie y Manuel en el evento Adoremos en Nacaome, donde Melvin y Beatriz nos acogieron y el Señor me dijo que compusiéramos canciones para que le adoraran con danzas la pequeña Tania y su grupo.

Quizás no sea el árbol del sueño exactamente. Pero debo decir que se parece bastante.


Tuesday, March 18, 2014

El Dios Creador


En el principio creó Dios los cielos y la tierra, y todo lo que Él ha creado ha sido bueno en gran manera. Aléjate un momento del afán del día para observar la creación de Dios, y te asombrarás del genio del Creador. Las flores son un deleite para los ojos; el trinar de los pájaros, un deleite para los oídos; la temperatura de esta mañana (21°C), un deleite para el tacto; el olor de la tierra húmeda, un deleite para el olfato; el sabor de la naranja, un deleite para el gusto. No en vano Edén significa deleite. ¡Nuestro Dios es un artista!

Cuando tú y yo creamos, ¿no estamos imitando a nuestro Creador? Hacemos pintura para el ojo, música para el oído, ropa para el tacto, perfumes para el olfato, y comida para el paladar. Aun creamos obras multisensoriales, como la cinematografía o la danza que deleitan el ojo y el oído. O la cocina gourmet, que apela al gusto, al olfato, al tacto y a la vista. (¡Sólo le falta cantar!)

Cuando adoras a tu Creador, ¿cuál es tu expresión favorita? ¿Escribes poesía? ¿Dibujas caricaturas? Nuestro Dios es TAN creativo, tan variado, tan versátil... Si nos creó a todos tan  diferentes, seguramente no esperará que todos expresemos nuestro amor de la misma manera, con la misma técnica, o en el mismo estilo.

Tú eres único. No hay otro como tú. Adora al Dios de la creación con todo TU corazón, con toda TU alma y con todas TUS fuerzas. Haz tus oraciones, tu música, tu arte. Con ello labras la tierra de Honduras y la transformas un poco más en Edén.

Wednesday, March 12, 2014

Cuando Prestas Atención


Cierta vez me encontré sustituyendo a Enrique y Ana Rebeca Contreras en el discipulado de jóvenes. Como imaginarán de tales clases, los muchachos van llegando de a poquitos con sus celulares, audífonos y aparatos de juegos de video. (Su capacidad de atención bíblica generalmente llega 20 minutos más tarde.) Esa tarde hicimos un pequeño experimento – dejen sus celulares y salgan a orar a solas. ¡Los resultados fueron impresionantes!

Como tantas cosas en el reino de Dios, las instrucciones eran realmente sencillas. Los muchachos debían dejar todos sus aparatos en el salón y buscar un lugar en el patio donde estar a solas. Luego debían platicar con el Señor por quince minutos. Como sabemos, platicar implica una interacción verbal. Hablamos y escuchamos. Después de reforzar las contraseñas de acceso a sus celulares, los muchachos salieron a encontrarse con el Señor.

Como Jesús cuando sus discípulos retornaban de una misión, mi espíritu se regocijaba escuchando los reportes. ¡Las cosas que estos chicos escucharon de la boca de Dios! Para algunos, la Palabra era dirección para sus vidas. Para otros era una exhortación a ser mejores. A algunos hasta les jalaron las orejas. Pero todos fueron tocados. La pregunta entonces era: ¿Cómo es que en sólo quince minutos, el Señor convierte un manojo de tecnófilos en una compañía de profetas bajando del monte con palabras de sabiduría para salvarse, no sólo a sí mismos, sino a toda su generación?

La respuesta es sencilla: hicieron a un lado sus distractores y le prestaron atención al Todopoderoso. Como dijo el evangelista británico Smith Wigglesworth: Dios está más deseoso de responder que nosotros de pedir. Él está más cerca de lo que imaginas. Porque muy cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Dt. 30:14

Wednesday, March 5, 2014

Jesucristo No Es Barbero


Algunos piensan que todo varón debe tener su barbero; uno que ya conozca exactamente cómo le gusta que le dejen el cabello. Para mí no ha sido fácil comprometerme con uno, aunque lo he intentado. El problema es que la primera vez me lo dejan como a mí me gusta (corto) Y como a mi esposa le gusta (un poquito más largo enfrente), PERO de la segunda vez en adelante me lo van dejando progresivamente más largo hasta el día en que sólo llego a que me peinen. Entonces me pregunto si vale la pena y opto por cortármelo yo mismo en casa.

Sí, ya sé que no es muy convencional cortarse uno mismo el cabello, pero realmente no es tan difícil como suena (considerando que sólo me tengo que pasear la máquina con la cuchilla #2 por todo el cráneo). Pero como supondrás, mi tema no es realmente la barbería, así que vamos al grano.

Cuando una persona se encuentra con la religión organizada (sea cual sea la ideología, corriente o denominación), generalmente halla personas amables dispuestas a servirle y a ayudarle a pasar un buen rato. Hay una atención especial con los primerizos porque hay un interés genuino por hacerlos sentir en casa. Esa primer visita parece ser “Sí y Amén” en todo. A medida que la persona regresa una y otra vez, las cosas van cambiando. Para ser justos, quizás no es que las cosas cambien en sí (pues pocas cosas hay más pétreas que la religión organizada), pero la percepción de las cosas va cambiando. Algo así como que la primera vez que visité una barbería no le presté mucha atención a la Señorita Laura en la televisión, porque estaba más atento a que mi nuevo barbero entendiera cómo quería el corte. Pero cuando volví un mes más tarde con mi hijo, lo noté y me ofendió; aunque en realidad la barbería y su programación siempre fueron las mismas.

Lo que le sucede, pues, a la gente que se encuentra con la religión organizada, es que poco a poco comienzan a descubrir los anacronismos y las vacas sagradas. Algunos deciden soportarlo y seguir adelante, pero otros optan por quedarse en casa y “cortarse el pelo” por sí mismos. Estos últimos terminan haciéndose un dios a su propia imagen y conforme a su semejanza. Un dios que nunca los contradice y que nunca los corrige. Un dios que siempre está a sus órdenes. Un dios que nunca podrá salvarlos. Los que quedan en la religión organizada no están mejor. Las muchas “creencias” y tradiciones, no sólo no tienen poder para salvar, sino que mantienen a sus seguidores a base de un sistema de culpas.

Bendito sea nuestro Padre Dios Todopoderoso que Jesucristo no es barbero. Él no cambia, ni tampoco disminuye su poder. Jesucristo no es religión muerta. Él vive eternamente y es poderoso para salvar a todo aquel que cree y le busca de corazón.